
La cocina criolla es una mezcla de África, de varios países europeos y China. Los chinos crearon en La Habana -no en San Francisco- el arroz frito (unión de carnes de diverso tipo con arroz ya cocinado y frito en la sartén, cebollín, frijolitos y salsa china).
No existe en otro lugar del mundo el arroz frito chino-cubano, ni en China ni en el China Town de San Francisco, ni en Nueva York. Al igual que el sándwich, ya patentizado por Cuba, y ramificado en varios otros lugares, México entre ellos.
El investigador Cristóbal Díaz Ayala afirma: "los cubanos tienen una pasión, adicción y amor por el baile similar a una religión". A través de él muestran sus costumbres, su estilo de vida, su historia. El béisbol es una de sus aficiones más queridas. Muchas de las canciones tienen temas beisboleros, mientras que términos propios de ese deporte forman parte de un lenguaje figurado, del vocabulario de la vida cotidiana. Otro de los entretenimientos típicos de los habitantes de la isla es el dominó, al punto de existir campeonatos nacionales.
Buscar rasgos que puedan caracterizar al cubano ha sido, más que una tradición, una obsesión en la isla y fuera de ella. Al cubano se le achacan defectos y cualidades, como sucede en todos los países.
La investigadora Denia García recuerda que, en 1947 se publicó un artículo en una famosa revista que hablaba sobre las características de nuestra idiosincrasia: "Los cubanos se caracterizan individualmente por su simpatía e inteligencia, y en grupos por su gritería y apasionamiento; son hiperbólicos y desmesurados. Si nos invitan a comer, nos invitan no al mejor restaurante del pueblo, sino al mejor del mundo. Aman tanto la contradicción que llaman "monstruo" a las mujeres hermosas y "bárbaros" a los eruditos.
Hay que reconocer que tenemos a nuestro favor una mezcla de muchos pueblos y culturas, y en esa mezcla está la riqueza de nuestra identidad, el ajiaco del que hablaba el sabio Fernando Ortiz.
En los cubanos hay sangre de chinos (una cultura milenaria, rica y poderosa), de África (donde se dice que surgieron los primeros hombres), de los árabes que poseen un milenario acervo, de los españoles en cuya sangre alienta el mestizaje con países del Oriente, desde la Edad de Piedra.
El poeta y ensayista cubano Guillermo Rodríguez Rivera asegura que en sus coterráneos la amistad es un sentimiento que, en cierto sentido, sobrepasa el amor familiar, es como un vínculo de sangre. Cualidad que se ha ido perdiendo en el mundo donde la soledad es un constante, sobre todo en las ciudades industriales.
Una de las características que más atrae a los turistas es la hospitalidad proverbial de los cubanos. El puerto de La Habana fue un lugar donde ningún visitante se sintió extranjero.
La música es quizás el mejor símbolo distintivo de la identidad del país. El escritor Alejo Carpentier afirmaba: la isla de Cuba ha tenido el poder de crear (â��) una música con fisonomía propia que, desde muy temprano, conoció un extraordinario éxito de difusión".
Cuba es hoy día una potencia cultural en los dominios de la plástica, en la construcción de castillos en la defensa de la capital, en el ballet, la danza, la literatura, el teatri y en otros dominios. Pero, la música siempre será lo primero.
ag-rfl.
*Colaborador de Prensa Latina
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